Desde el patio mallorquín, centro del edificio, hasta la terraza con vistas a la catedral, Portella dispone de espacios donde disfrutar acompañado como rincones íntimos.
En los cimientos del edificio, antigua ubicación de un horno de alfarería, podrás encontrar una zona dedicada al bienestar equipada con un gimnasio y un baño de vapor. Conectado con el patio, casi formando un único espacio, el salón principal del edificio es el lugar donde pasar la tarde relajado. En la terraza podrás disfrutar de unas magníficas vistas sobre los Baños Árabes y la catedral de Mallorca.